Ovidio Guzmán, uno de los hijos del famoso capo mexicano el “Chapo”, fue detenido en Sinaloa. La recaptura de este importante personaje dentro del cartel que opera en dicho estado no es coincidencia con la próxima visita del presidente de EEUU a México, Joe Biden, apunta Óscar Balderas, periodista experto en temas de seguridad.
Y es que recientemente el Gobierno de Estados Unidos le había exigido a México muestras de que el aparato de seguridad del país latinoamericano funciona correctamente, recuerda Balderas en entrevista con Sputnik.
“Sobre todo a la luz de que el envío masivo de fentanilo está causando una crisis de salud pública enorme en Estados Unidos”, sentenció el periodista, quien se especializa en temas de narcotráfico y seguridad en México.
La captura de Ovidio Guzmán, afirma, representa una oportunidad para el Gobierno de México recuperar la credibilidad ante EEUU entregándoles un objetivo prioritario para Washington, pues el hijo del Chapo era solicitado por autoridades estadounidenses, quienes ofrecían una recompensa de 5 millones de dólares por él.
“Me parece que tiene más importancia en lo político que en lo operativo y de cómo podría afectar al propio cártel de Sinaloa”, señaló.
Sobre Ovidio Guzmán pesan cargos en la Fiscalía de Columbia, Estados Unidos, en donde se le acusa de tráfico de drogas, detalló la periodista mexicana Laura Sánchez Ley.
De acuerdo con Óscar Balderas, la detención de Ovidio realmente no pesará en la estructura del cártel de Sinaloa, pues, afirma, que quien realmente lleva las riendas del grupo conocido como Los Chapitas es Iván Archivaldo, el hijo mayor de Guzmán Loera.
“Cuando alguien es abatido, es detenido, las rutas pueden continuar, de hecho lo vimos con el propio Chapo Guzmán, es detenido, es extraditado y sus túneles, al menos los de Tecate, siguen estando operando y siguen siendo disputados”, indicó.
En cuanto al envío de fentanilo a EEUU, el especialista augura que no se reducirá, pues la estructura del grupo del narcotráfico que opera en Sinaloa es tal que le permite seguir operando a pesar de que sus cabecillas sean detenidos.
“No se lleva consigo las rutas, no se lleva consigo los contactos, no se lleva consigo los fabricantes. Las rutas ahí están, los fabricantes ahí están, los laboratorios ahí están y van a seguir operando con un liderazgo distinto y es parte de la estructura que ha logrado el cártel de Sinaloa”.
Balderas advierte que lo que sí podría desencadenar la recaptura de Ovidio Guzmán es una ola de hechos violentos no solo en Sinaloa, pues también podría haber enfrentamientos entre integrantes del crimen organizado en Chihuahua, Sonora y Colima que, apunta, van a internar tomar las rutas lideradas por el hijo del Chapo.
El grupo del Mayo Zambada, el del Chapo Isidro que tiene una fuerte rivalidad con los hijos de Guzmán Loera, y finalmente el cártel de Caborca, son los que posiblemente intentarán ganar algunas rutas al cártel sinaloense tras la captura de Ovidio.
Con información de Sputnik