De acuerdo con los datos oficiales, la intensidad de carbono del país, es decir, las emisiones por unidad de Producto Interno Bruto, ha disminuido un 48% desde 2005 hasta 2020. La mejora de la eficiencia energética y el uso de energías renovables han contribuido al descenso de los índices de carbono.
Durante el último año, China redujo su intensidad de carbono entre un 3% y un 8%. China espera alcanzar su pico de emisiones en 2030 y la neutralidad de carbono en 2060.
En muchas ciudades del país se fomentan medios de desplazamientos más ecológicos como bicicletas compartidas y bicicletas eléctricas que facilitan los desplazamientos en transporte público.
Además, algunos bancos han creado cuentas individuales de carbono, que dan a los usuarios créditos por actividades de baja emisión de carbono que pueden canjearse por cupones de autobús y metro.