El periodista Enrique Quintana escribe en su columna Coordenadas de esta semana, una análisis sobre el significado de la decisión del gobernador del Estado de México en relación a la designación de Alejandra del Moral como Coordinadora de la Defensa del Estado de México.
“Desde hace varios meses se sabía que la persona más cercana al gobernador Alfredo del Mazo, entre los aspirantes del PRI a convertirse en candidatos, era la secretaria de Desarrollo Social, Alejandra del Moral.
El jueves pasado, de manera sorpresiva, la funcionaria renunció a su cargo en el gobierno estatal y fue nombrada Coordinadora de la Defensa del Estado de México.
Al PRI le quedaban solo dos opciones: elegir a la diputada Ana Lilia Herrera, que se hacía notar por su criterio independiente, manifestado en su abstención en la votación en la Cámara de Diputados a propósito de la extensión del periodo en el que se asignó a las Fuerzas Armadas la función de seguridad pública. Y la funcionaria del gobierno de Del Mazo.
En el caso de que Del Mazo verdaderamente quisiera defender para el PRI el Estado de México, optaría por Herrera. Sin embargo, la definición de este, bien podría ser interpretada como la rendición de la plaza a cambio de las indulgencias de Morena y quizás incluso de un puesto.
En redes sociales ha circulado una foto en la que Alfredo del Mazo, saluda al Papa Francisco, lo ubica quizás como un próximo embajador en la Santa Sede.
Por otra parte, el PAN tampoco tiene muchas opciones. Si opta por apoyar a Enrique Vargas, fracturán la Alianza y le estarían abriendo la puerta al triunfo a Delfina Gómez.
Una derrota de la coalición Va por México, o del PRI y el PAN, en el estado con el padrón más grande del país en el año previo a las elecciones de 2024 puede marcar en buena medida el ambiente previo a la definición de los candidatos a la presidencia de la república.