Ciudad de México. La Federación Nacional de Estudiantes Revolucionarios “Rafael Ramírez” (FNERRR) denuncia que, en su Cuarto Informe de Gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó cifras que no se apegan a la realidad de la educación mexicana.
En materia educativa, el presidente mencionó que en México “está por convertirse en realidad el principio de que la educación y la salud no son privilegios, sino derechos del pueblo”. Ensalzó la supuesta cobertura de las becas para estudiantes pobres y las Universidades para el Bienestar “Benito Juárez”, estas últimas como símbolo del desarrollo en materia de infraestructura educativa realizada en cuatro años.
Respecto a las estadísticas del ciclo escolar 2021-2022 resaltó que solo fueron 520 mil alumnos menos inscritos en el sistema educativo en comparación con el año previo. No explicó la razón de esta disminución, pero afirmó que el gobierno federal implementó como estrategia la transmisión de clases a través de la televisión y el internet.
Adán Márquez Vicente, secretario de organización de la FNERRR, expresó que el Cuarto Informe no refleja en cuanto educación, la dura realidad en México: “el rezago educativo que se traduce en pérdida de aprendizajes por grado escolar, la deserción académica, la nula atención a la infraestructura educativa y el nulo planteamiento para retomar un nivel educativo competente”.
Según datos del INEGI, para el ciclo escolar 2020-2021, fueron 5.2 millones los que no se inscribieron por motivos asociados a la COVID-19 o por falta de dinero o recursos. De la deserción de este ciclo escolar, López Obrador no hizo ninguna referencia en su informe. Además, según Educación con Rumbo no fueron 520 mil alumnos menos, sino 607 mil 403 los que desertaron, es decir, 87 mil más de los presentados por el mandatario. Alguna otra referencia al rezago educativo tampoco fue presentada en el informe.
Para los jóvenes de la FNERRR las causas de la deserción escolar son claras aun cuando López Obrador intenta silenciarlas: la creciente pobreza de las familias derivada de la mala estrategia económica federal, aunado a la sensación del insuficiente aprendizaje con la educación a distancia.
“AMLO miente al decir que la educación en México ha dejado de ser privilegio, la cobertura no es amplia y tampoco existen políticas que ayuden a las familias menos privilegiadas a tener acceso a la educación básica, aún menos a la superior. Sumado a esto, la SEP sólo ha presentado planes improvisados para ‘mejorar’ la formación académica de aquellos alumnos que pudieron regresar a clases ante la pérdida de escolaridad durante la pandemia que pasó de 8.8 a 6.8 años (UNICEF y BM, 2022). Estamos ante cuatro años de retroceso educativo con la 4T”, denunció Márquez Vicente.
En los últimos días se ha vislumbrado un panorama más desalentador a este retroceso educativo: la nueva secretaria de Educación, Leticia Ramírez, está lejos de presentar una solución a la realidad educativa, su falta de preparación se advirtió en una reciente entrevista que se viralizó.