Rodrigo Abdala Dartigues es nombrado por segunda ocasión como delegado de Bienestar en Puebla, en sustitución de Vida Inés Vargas Cuanalo.
Abdala, el súper delegado, como lo nombró el presidente Andrés Manuel López Obrador, a partir de este día despachará en las oficinas ubicadas en la colonia Huexotitla después de permanecer al frente de la Unidad de Planeación y Evaluación de Programas para el Bienestar en la Secretaría Federal.
Abdala, durante su primer intento como delegado de Bienestar, logró obtener cinco denuncias ante la Secretaría de la Función Pública y fue uno de los 10 delegados que estaban siendo investigados por desvío de recursos públicos con fines electorales.
Fue el mismo gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, quien señaló a Rodrigo Abdala de utilizar los recursos y programas sociales, para beneficiar a algunos actores políticos, como Ignacio Mier.
El arribo de Rodrigo Abdala fue dado a conocer por el secretario técnico del Gabinete de la Presidencia y Coordinador General de Programas para el Bienestar, Carlos Torres Rosas, a través de un Twitter, y posteriormente el propio Abdala Dartigues en sus redes sociales hizo lo propio.
Abdala Dartigues es reconocido por sus últimos fracasos como:
1.-La elección de 2021, cuando renunció a su cargo para operar para Claudia Rivera Vivanco en su fallida aventura por la reelección en el ayuntamiento de Puebla.
2.-La famosa consulta popular del pasado 1 de agosto para castigar a algunos ex presidentes de la República, que él promovió en el estado, no tuvo la convocatoria esperada.
3.- Su pésima estrategia para vacunar a personas de la tercera edad en Tehuacán, en donde solo 24 mil ‘abuelitos’ se vacunaron, por lo que poco más de tres mil dosis fueron reintegradas al Gobierno del Estado para que fueran enviadas a otros municipios.
