El presidente de la capital de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, anunció orgulloso que para el próximo 2023 “no habrá incremento de impuestos”.
Esto, al informar que su administración ya se encuentra trabajando en la próxima ley de ingresos 2023, donde evalúan distintos ajustes a los programas municipales del año próximo.
Y el que los impuestos no suban es una excelente noticia para cualquiera; sin embargo, la afirmación de Rivera resulta abiertamente descarada.
El edil afirma orgulloso que el próximo año no aumentará los impuestos, o, lo que es lo mismo, no cobrará más a los capitalinos; lo cierto es que, ya lo está haciendo.
¿No lo ve? Por ejemplo, los parquímetros. La idea de un reordenamiento y embellecer la ciudad eliminando a los ‘viene viene’ resulta, de hecho, una medida recaudatoria. A las cifras: Del 3 de junio al 4 de agosto el ayuntamiento de Puebla recaudó un millón 65 mil 127.5 pesos por el uso de parquímetros; sin hablar de lo juntado por las multas.
Y, bajo el pretexto de cuidar al peatón y disminuir los accidentes viales, ahí va otra medida: fotomultas en calles de la capital. Pero “no es por la recaudación”, dicen en el ayuntamiento.
Sin olvidar, claro está, que el panista insiste con el cobro del alumbrado público.
No habrá nuevos impuestos el año que viene, porque, veladamente, ya los está poniendo desde ahorita.