La tarde de este jueves un fuerte operativo policiaco a cargo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) contra ambulantes se presenció en el corazón de la capital.
Los informales llegaron a las calles de Puebla alrededor de las 11 de la mañana. Colocaron sus puestos de la 6 a la 12 Poniente-Oriente y en las calles de la 3 y 5 Norte entre la 4 a la 12 poniente Oriente en ambos sectores de la metrópoli.
El primer enfrentamiento ocurrió en la 8 Oriente y esquina 5 de mayo luego de que los ambulantes trataron de defender sus artículos de una camioneta pick up del Ayuntamiento trasladada por los uniformados.
Denunciaron abuso, pues aseguraron los elementos policiacos agredieron a todo aquel que se quiso acercar a auxiliar.
La presencia de los elementos de seguridad fue alta, pues desde la 6 Oriente-Poniente hasta la 12 Oriente-Poniente se encontraron bloqueadas por unos 150 elementos, aunado del helicóptero y los que estaban sobre patrullas en las calles alternas.
Por su parte, el presidente municipal Eduardo Rivera Pérez, sentenció que «no hay nada que negociar, la decisión está tomada», pues se ha logrado el reordenamiento del primer cuadro y no se caerá en «provocaciones».
Rivera Pérez indicó que el pasado martes se dialogó con algunos de los líderes de ambulantes. Comentó que la mayoría de las organizaciones importantes accedieron y «entendieron que no tienen que ocupar el Centro Histórico».
Sin embargo, los informales aseguraron que no fue del todo cierto. Aseguraron que comprenden la situación, más no comprenden por qué el gobierno no pone en acción algún proyecto que sustituya el empleo perdido.
“Nosotros solo queremos trabajar, sí, comprendemos la situación, pero que ellos comprendan la nuestra. Muchos tenemos familias que mantener ¿Qué vamos a hacer? ¿De dónde vamos a vivir? ¿De qué forma nos están apoyando? Solo nos dan largas y nos reprimen, miren cuántos policías y hasta helicóptero”, declaró Teresa Martínez, ambulante del Centro Histórico.
Rivera Pérez resaltó que no se podrá vender en los espacios públicos del Centro Histórico; sin embargo, en la periferia sí siempre y cuando “los comerciantes paguen sus permisos ante las instancias del ayuntamiento”.
Los ambulantes exigieron la presencia del titular de la Secretaría de Gobernación (Segom), Jorge Cruz Lepe, para continuar con las negociaciones, sin embargo, no hizo acto de presencia. Únicamente llegaron supervisores de Segom identificados con casacas azules.
Durante el suceso, aparecieron comerciantes de las más de 30 organizaciones registradas por la Comuna.
Entre los líderes que estaban ahí se encontraba Alejandra Leyva y Juan Carlos Ramírez, quienes reprocharon que Cruz Lepe nunca les ha ofrecido una propuesta de reubicación en las periferias de la ciudad como oficialmente lo señala.
Por el contrario, aseguraron, el ayuntamiento y la Segom los han tratado como “delincuentes” e iniciado contra ellos denuncias que han derivado en órdenes de aprehensión.
En esa línea, el resto de comerciantes establecidos en locales del corazón de la ciudad procedieron a cerrar sus respectivos lugares de trabajo, pues aseguraron no sería la primera vez que “se los pasaran trayendo a ellos también”.
Subrayaron que en operativos de este tipo han salido heridos también menores de edad, pues la policía “no se fija a quién le da, si no con qué”. Por lo que los menores —hijos de los ambulantes—, fueron resguardados en locales vecinos.
Los bloques de policías instaurados en el corredor no les permitieron a las madres comerciantes pasar por sus hijos resguardados en los locales.
Mas de una centena de granaderos estuvieron fijos a custodiar la avenida mientras esperaban una orden para retirarlos, acto interpretado como una intimidación y “represión”, por parte de los vendedores.
Desde febrero pasado el ayuntamiento de Puebla y la Policía Estatal realizaron operativos para retirar a los vendedores de la avenida 5 de Mayo, así como en la 8, 10, 12 y 14 Poniente.
Hasta el momento no se ha concretado ninguna de las propuestas de reubicación planteadas públicamente por la Comuna capitalina.