Por Leticia Montagner
Los cárteles mexicanos de la droga han realizado más de 9 mil vuelos de aviones no tripulados en el espacio aéreo de los Estados Unidos en el último año, para vigilar las operaciones de seguridad y aplicación de las leyes estadounidenses en la región fronteriza sur, informó al portal norteamericano Judicial Watch, un alto funcionario de Seguridad Nacional.
Los drones están observando agencias federales, estatales, de condados y de las ciudades cercanas de la frontera con México, incluida la Patrulla Fronteriza, el Departamento de Seguridad Pública de Texas, la Guardia Nacional de Texas, los alguaciles del condado y la policía local.
La Patrulla Fronteriza, que opera la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés), capturó alrededor de una docena de los drones y accedió a los sistemas de guía y memoria de los Vehículos Aéreos No Tripulados (UAV, por sus siglas en inglés), para obtener información de inteligencia, según el funcionario de alto nivel.
Judicial Watch tuvo conocimiento de las incursiones de drones durante una visita reciente a la frontera sur y específicamente mientras entrevistaba a funcionarios federales en el sector del Valle del Río Grande de CBP en Texas.
Judicial Watch está investigando más el asunto y ha presentado una solicitud de la Ley de Libertad de Información (FOIA, por sus siglas en inglés), ante CBP, la agencia de 60 mil miembros encargada de mantener a los terroristas y sus armas fuera de los EU, para todos los registros relacionados con el uso de drones por parte de organizaciones criminales operando a lo largo de la frontera con el fin de vigilar a los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley norteamericana.
La solicitud de registro público federal incluye, pero no se limita a, toda la información que representa el número conocido o estimado de instancias del uso de dicha tecnología, así como todos los informes, evaluaciones de inteligencia,
Funcionarios federales en el terreno le dijeron a Judicial Watch que los cárteles utilizan los vuelos de vigilancia de vehículos aéreos no tripulados para facilitar el contrabando de personas y el tráfico de drogas.
Específicamente, ayudan a identificar brechas en la cobertura fronteriza y ayudan a los cárteles en ciertas áreas para mover cargas delicadas o de alto valor a través de ubicaciones fronterizas alternativas.
Los datos analizados de los drones confiscados también proporcionaron a las autoridades estadounidenses otra información confidencial de las fuerzas del orden que no se puede hacer pública, dijeron fuentes gubernamentales y agregaron que los cárteles de la droga comenzaron a usar los dispositivos hace unos años.
Brandon Judd, Presidente del Sindicato que representa a los 20 mil agentes de la Patrulla Fronteriza, indicó a Judicial Watch que los drones también se utilizan para contrabandear pequeñas cantidades de drogas a los EU. Están lanzando fentanilo, dijo Judd esta semana, vuelan a ciertos lugares, los dejan caer al suelo y regresan a México. Los drones no son de grado militar,confirmó Judd, sino más bien normales que se pueden comprar en cualquier lugar.
Los informes de cárteles mexicanos que utilizan vehículos aéreos no tripulados para mejorar sus operaciones ilícitas comenzaron a surgir en los últimos años. De hecho, hace tres años, agentes en el sector de El Paso, a unas 750 millas del Valle del Río Grande, revelaron en un informe noticioso que habían presenciado lo que creían que era el primer uso de un dron por parte de un cartel mexicano para actuar como observador.
En la historia se cita a funcionarios de CBP del sector de El Paso diciendo que los agentes descubrieron una nueva táctica en la contra vigilancia, refiriéndose al UAV. Un agente que monitoreaba la frontera con una cámara infrarroja descubrió que el dron viajaba hacia el norte de los EU desde México, afirma el artículo.
El año pasado, un periódico de México informó que algunos de los carteles más notorios del país usaron drones con explosivospara atacar a la policía en la parte occidental del país. En 2018, un estudio académico descubrió que los cárteles usan drones para buscar agentes de la Patrulla Fronteriza e informar a los traficantes de drogas sobre sus posiciones.
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