Rosa María Dávila Partida
El conflicto Rusia-Ucrania ocupa grandes espacios en los medios informativos nacionales y mundiales. No hay nada de exagerado en este acaparamiento de espacio pues, como lo han dicho muchos analistas, y lo reconoció el presidente Joe Biden “en su discurso… presentó la guerra en Ucrania como la pieza central de una lucha más amplia entre ideologías globales en competencia” (Reforma). Ese es el meollo del asunto, en esta guerra que formalmente, es decir aparentemente, es únicamente entre Ucrania y Rusia, en realidad se está jugando el destino de todo el planeta.
Los Estados Unidos, con su brazo armado la OTAN, quiere un mundo unificado bajo su mando para su exclusivo beneficio; el bloque contrario donde forman Rusia y China, persigue un mundo multipolar, con la riqueza social mejor repartida entre todas las naciones del planeta. Los partidarios de la hegemonía norteamericana condenan a Rusia con los términos más duros que se les ocurren; quienes queremos un mundo menos injusto y cruel para el género humano, pensamos lo contrario. Los tiempos de guerra siempre son tiempos de definiciones, los líderes de los países toman posición y llegó la hora de que los pueblos también esclarezcan con qué bando les conviene alinearse. Porque eso sí, todos y cada uno debemos elegir de qué lado estamos.
Es en este contexto que presento la siguiente denuncia. Los medios de comunicación controlados por el imperialismo,además de mentir descaradamente al presentar a Rusia como la instigadora del conflicto, ostentosamente guardan silencio sobre el asunto de las armas biológicas que desde hace 14 años se estaban investigando en laboratorios ucranianos, según noticia divulgada por Fox News el 29 de marzo pasado: “El Pentágono de verdad investiga patógenos en Ucrania”, dijo el presentador estadounidense, Tucker Carlson. “No sabemos desde cuándo lo hace, pero sabemos con certeza que desde hace al menos 14 años”.
El mismo Tucker Carlson recordó recientes revelaciones de Daily Mail que, citando correos electrónicos del hijo del presidente estadounidense, Hunter Biden, reportó que este ayudó a canalizar millones de dólares de financiación para una empresa que fue contratista del Departamento de Defensa estadounidense, especializada en la investigación de enfermedades que pueden causar pandemias y “podrían usarse como armas biológicas”.
Esta información sale a la luz por declaraciones del Ministerio de Defensa de Rusia, pues la operación militar rusa en Ucrania les ha permitido desmantelar cinco laboratorios biológicos que participaban en proyectos encargados directamente por el Pentágono, y cuyos objetivos en el territorio ucraniano han estado “lejos de ser científicos”.
¿Qué investigaba el Pentágono? De acuerdo a declaraciones de jefe de las Tropas de la Defensa Radiactiva, Química y Biológica de Rusia, Ígor Kirílov, recogidas por RT el 31 de marzo: “Joanna Winthrol, jefa de la oficina en Ucrania, supervisó la coordinación de los proyectos de armas biológicas en ese país y la selección de los ejecutores, según el alto funcionario. «Bajo su supervisión directa se llevaron a cabo los proyectos UP-4, UP-6 y UP-8, de Estados Unidos, para estudiar patógenos mortales como el ántrax, la fiebre congoleña y la leptospirosis».
También investigaban cómo trasladar esos patógenos a territorio ruso, así lo reveló una carta de la empresa ucraniana Motor Sich al fabricante turco de drones Baykar Makina. Los ucranianos preguntaron específicamente si los drones podían transportar 20 litros de carga útil en aerosol a una distancia de 300 kilómetros, lo que los pondría al alcance de una docena de grandes ciudades rusas y de casi toda Bielorrusia. «Se trata del desarrollo, por parte del régimen de Kiev, de medios técnicos de entrega y utilización de armas biológicas, con la posibilidad de usarlas contra la Federación Rusa», precisó el mismo Ígor Kirílov.
¿Por qué se les llama patógenos mortales? El ántrax puede infectarse al inhalar esporas; los síntomas pueden variar desde una úlcera cutánea con una costra oscura hasta dificultad para respirar. Los humanos pueden contraer leptospirosis mediante el agua, el suelo o los alimentos contaminados; los síntomas son fiebre alta, dolor de cabeza, sangrado, dolor muscular, escalofríos, enrojecimiento de los ojos y vómitos, sin tratamiento, la leptospirosis puede causar daños en el riñón y el hígado, o incluso la muerte. La fiebre hemorrágica congoleña tiene como síntomas fiebre, dolor de cabeza y garganta, mareo, dolor muscular, conjuntivitis, náuseas, sangrados, etcétera.
Los gobernantes de Kiev, asesorados y financiados por el gobierno estadounidense estaban preparando estas armas biológicas para usarlas contra los ciudadanos rusos y bielorrusos. La operación militar especial lanzada por el presidente Putin en Ucrania, afortunadamente descubrió estos laboratorios antes de que pusieran en marcha su plan genocida que debía empezar el 8 de marzo. Aquí está otra prueba irrefutable de que Ucrania está gobernada por neonazis que no se detienen ni ante los peores crímenes con tal de sacar adelante sus planes de dominio contra el mundo entero.
En el conflicto Rusia-Ucrania está clara la amenaza que lanza el imperialismo norteamericano a todos los pueblos del mundo: o te rindes a las sanciones, a las condiciones abusivas y los saqueos que te impongan, o se van contra los ciudadanos de esos países rebeldes con sanciones económicas, bombas, misiles y armas biológicas. Se trata de destruir su economía, de crear el caos, para imponer gobiernos títeres que obedezcan todas sus órdenes.
Por eso el Movimiento Antorchista Nacional llama a todos los mexicanos a denunciar los planes de dominio de los yanquis, a no tragarse las mentiras difundidas por las prensa vendida, a manifestar nuestro apoyo al bloque de países encabezados por Rusia y China, no porque esperemos que ellos nos traigan la felicidad embotellada y lista para nuestro consumo; simplemente estamos seguros de que su triunfo abrirá las puertas de la prisión imperialista a los pueblos de la tierra para su libre desarrollo.
También manifestamos nuestro completo apoyo a la propuesta presentada por el presidente de China, Xi Jinping, durante la 23ª Cumbre China-Unión Europea, el pasado primero de abril. Son cuatro puntos sobre la crisis de Ucrania.
El primero es promover las conversaciones de paz. El mandatario chino indicó que la comunidad internacional debe seguir creando las condiciones y el entorno favorable para las negociaciones entre Rusia y Ucrania, en lugar de echar leña al fuego y aumentar las tensiones.
En segundo lugar, prevenir una crisis humanitaria de mayor escala. China ha proporcionado múltiples lotes de ayuda humanitaria de emergencia a Ucrania, y ha enviado suministros a los países europeos que reciben grandes números de refugiados.
Tercero, impulsar una paz duradera en Europa y el continente euroasiático, y atender las preocupaciones de seguridad legítimas de todas las partes involucradas.
El cuarto punto de la propuesta de Xi Jinping es evitar que el conflicto regional se magnifique. El mandatario chino señala que China y la UE deben trabajar conjuntamente para mantener estable la economía mundial.
