China sufre su peor repunte epidémico en dos años a causa de la variante ómicron del coronavirus, por lo que las autoridades ordenaron confinar de nueva cuenta a más de 30 millones de personas.
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Entre las ciudades confinadas se encuentran meridional de Shenzhen, de 17 millones de habitantes, , además de Changchun, de nueve millones, Sanghái sólo ha pedido a sus ciudadanos que restrinjan movimientos fuera de la ciudad y Pekín ha clausurado varias áreas.
También se han puesto en cuarentena complejos de Pekín como Jianwai Soho y Fulicheng D, informa Asociated Press.
Se trata del confinamiento de mayor magnitud anunciado por China desde el impuesto en la metrópolis de Xi´an, cuando 13 millones de habitantes fueron puestos en cuarentena a finales del año pasado, por un mes.
China, donde se detectó inicialmente el Covid-19, a finales de 2019, atajó rápidamente la epidemia en la primavera de 2020 adoptando unas medidas de confinamiento muy estrictas que afectaron a ciudades enteras.
El gigante asiático logró así controlar el avance de los contagios en gran medida, y ha reportado un balance oficial de poco más de 100,000 casos -4,636 de los cuales, letales- en dos años.
Pero la variante Ómicron ha provocado brotes elevados localizados la semana del 7 al 11 de marzo, la mayoría de los casos de esta última ola se han registrado en la provincia de Jilin, en el noreste del país, con 1.412 positivos contabilizados en 24 horas. Su capital provincial, Changchun, de nueve millones de residentes, también está completamente confinada.
Entre los nuevos casos, 1.807 se produjeron por contagio local en diferentes puntos del país, destacando los hallados en la provincia de Jilin (noreste, 1.412), Shandong (este, 175), Cantón (sur, 62) o Shaanxi (norte, 39).
