La invasión de Rusia a Ucrania obliga el análisis de los motivos de Vladimir Putin para intervenir a un país.
En apenas unos días, el mapa mundial se nos movió. La invasión de Rusia a Ucrania obliga el análisis de los motivos de Vladimir Putin para intervenir a un país que se pensaba fácil de resquebrajar, advirtió la consultora Ruby Soriano.
Durante su participación semanal en Contigo Puebla, la analista resaltó el contraste entre las personalidades de los presidentes de Ucrania, Volodímir Zelenski, y de Rusia, frente a una crisis que deja víctimas y daños colaterales en la economía mundial.
La personalidad de Putin, dura e implacable, se alinea con sus inicios como agente secreto de la KGB. Desde que ejerce el mandato, ha hecho del nacionalismo ruso una apología, poco creíble, de una nación con mucha unidad.
Si bien es cierto que la población rusa reconoce la mano dura de Putin, también aceptan que la corrupción invadió a su gobierno. Saben que las redes traficantes rusos operan mundialmente y hacen negocios con el Kremlin.
Muy atrás quedaron los recuerdos de la vieja Unión Soviética y la caída de muchos muros del socialismo anquilosado, que mutó en un discurso de nacionalismo operante, para el control de libertades y las alianzas con organizaciones criminales.
Aquí, la colaboración semanal de Ruby Soriano.