¡Reprobado! El Congreso de Puebla está mal en transparencia, así lo demuestra un análisis del Instituto Belisario Domínguez del Senado de la República.
Según el estudio “Parlamento Abierto en México ¿Cómo Vamos?”, El Congreso de Puebla aprobó diez de 17 rubros de transparencia, lo que equivaldría a una calificación insatisfactoria de 5.8.
En esta investigación se evaluó que los congresos locales contaran con agenda legislativa, la asistencia a sesiones, audiencias públicas, contratos por honorarios, diario de debates, estudios e investigaciones, gaceta parlamentaria y un informe de uso y destino de recursos públicos.
El Congreso no dio todos los datos, según por la contingencia sanitaria del Covid-19; ocultó, pues, la agenda legislativa, los estudios e investigaciones, las órdenes del día y el padrón de cabilderos.
¡Ni siquiera tiene disponible las versiones estenográficas! ¿También por el Covid?
Recordemos que la legislatura pasada brilló por la ausencia de iniciativas propias, la mayoría fueron del gobernador Miguel Barbosa. Esta parece encaminarse al mismo rumbo. Al tiempo.