Por Leticia Montagner
Las camisas de mujer tienen botones a la izquierda, mientras que las de hombre los tienen a la derecha. Hubo una vez, cuando el género determinaba las modas durante la mayor parte de los últimos 100 años en el mundo occidental, que las mujeres usaban vestidos y faldas y los hombres usaban pantalones, excepto los escoceses.
Afortunadamente, la moda ha evolucionado de tal manera que tanto hombres como mujeres ahora son libres de usar lo que quieran.
Sin embargo, hay algunas tendencias de moda de género que persisten y la vestimenta de las mujeres es un poco más difícil de lo que debe ser respecto a los botones, que aparecen en diferentes lados de una camisa o chaqueta.
A pesar de que la gran mayoría de los humanos son diestros, las camisas de los hombres tienen botones en el lado derecho. Las camisas de mujer los tienen del lado izquierdo, lo cual es genial para los zurdos, pero es absurdo dada la relativa similitud en la forma de las camisas de hombres y mujeres.
La camisa abotonada es una de las prendas más unisex que usan hombres y mujeres.
Una buena camisa puede incluso ayudar a lucir más joven. ¿Entonces, por qué el botón del desconcierto? ¿Por qué las camisas de mujer y de hombre tienen botones en lados diferentes? se pregunta la revista The Atlantic con sede en Washington, Estados Unidos y las responde.
Los orígenes del debate sobre los botones opuestos se han perdido con el tiempo, aunque los historiadores tienen teorías. En el pasado, en el siglo XIII, los botones eran solo para aquellos que podían pagarlos. Todos los demás simplemente ataban sus ropas con tiras de tela o las sujetaban con palancas de madera.
Además de tener ropa que abotonar, las mujeres de clase media y alta también solían tener sirvientas para ayudarlas a ponerse y quitarse sus elaborados atuendos. Es difícil meterse en corsés, faldas de aro y varias capas de enaguas.
Sabiendo que alguien más se encargaría de abotonar, los modistas cosían los botones en el lado izquierdo de las prendas de las mujeres para que a la doncella le resultara más fácil abrocharlos con la mano derecha. Una vez que la ropa comenzó a producirse en masa, la costumbre se estandarizó y nadie ha pensado en cambiarla hasta el día de hoy.
Hay otras teorías, sobre todo con respecto a los bebés y los caballos. Una vez más, como la mayoría de las mujeres son diestras, tienden a llevar los pequeños con el brazo izquierdo sobre la cadera izquierda. Esto libera su mano derecha para contestar el teléfono, encender la tetera y desabotonarse la camisa si todavía está amamantando.
Con respecto a los caballos, bueno, las mujeres empezaban a montar de costado, generalmente giradas hacia el lado izquierdo. Aunque es casi seguro que esta es una noticia terrible para la espalda y las caderas, las camisas y chaquetas que se abotonan con la solapa derecha sobre la izquierda dejarían pasar menos viento mientras galopaba.
Pero ¿y los hombres? Es cierto que, al tener atuendos considerablemente menos restrictivos, por lo general se vestían solos. Eso pudo haber contribuido a establecer el botón derecho.
Pero la verdadera respuesta podría remontarse a los días de los caballeros, las justas y la caballería. Botón de camisa de hombre con la solapa izquierda sobre la derecha, que imita una de las convenciones más antiguas de la batalla: Escudo en el brazo izquierdo, espada en el derecho.
Como la lanza del enemigo habría estado en su mano derecha, las placas de armadura se superpusieron de izquierda a derecha para mantener el lado del escudo doblemente protegido. Incluso cuando los tiempos cambiaron y el armamento evolucionó, la ropa de los hombres retuvo los adornos militares y a menudo, se diseñó para incluir alojamiento para espadas y pistolas.
Como estos se sostenían en su mayoría con la mano derecha, era ventajoso poder desabrocharlos con la izquierda. La cuestión es que no hay absolutamente ninguna razón por la que esta extraña desigualdad de género deba persistir en las prendas abotonadas de hoy.
Los zurdos pueden no estar de acuerdo, pero vivir en un mundo que respete el dominio de la mano derecha cuando se trata de abrigos, chaquetas y camisas sería otro paso, aunque ciertamente pequeño, hacia la igualdad de género.
Después de todo, el diferencial de botones se ha utilizado antes para argumentar que las mujeres son físicamente inferiores a los hombres y que necesitan ayuda para vestirse como deben.
¿Por qué si no los botones estarían en el lado izquierdo? Pero, aparte de cambiar a las cremalleras, podríamos quedarnos atrapados con el desconcierto de los botones durante algunos años más. Por supuesto, siempre existe la opción de adaptar la ropa de cada quien.
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