De nada le sirvió al gobernador Miguel Barbosa echarse su buen plato de mole de guajolote, el que, según él, era la vacuna contra el Covid, pues este lunes anunció que la cuarta ola al fin lo alcanzó.
Al inicio de la pandemia el gobernador imitó al mandatario federal Andrés Manuel López Obrador al desestimar la gravedad de la enfermedad y ponerse a hacer bromas.
Así como AMLO pedía a la gente abrazarse y decía que con un “Detente, enemigo” se protegía del Covid, el morenista poblano decía que “si ustedes son ricos tienen el riesgo (de contagiarse), si ustedes son pobres no, los pobres estamos inmunes”.
Hoy, los poblanos rememoran esa frase y se preguntan, siguiendo su lógica, ¿no que Barbosa se decía pobre, cómo se contagió entonces? ¿Será que no lo es?
Hoy, una Puebla que ha llorado a casi 17 mil hermanos que han perecido a causa del mortal virus le recuerdan a Barbosa el martirio que muchos tuvieron que pasar durante esta pandemia, mientras él recomendaba mole de guajolote y caldo de pollo.