El primer lugar siempre, o es muy bueno o es muy malo. Los primeros lugares son siempre los más peleados o los más rehuidos.
Puebla no ocupa el primer lugar sino el cuarto en algo en lo que muchos desearíamos ocupara el último: muertes por Covid.
A finales de agosto, el Instituto para la Métrica y Evaluación de la Salud (IHME) de la Universidad de Washington, en sus proyecciones sobre el desarrollo de la pandemia, dio a conocer que, de no acatarse las medidas sanitarias necesarias, se podría llegar a las 16 mil 810 muertes por Covid-19 a fin de año.
Faltan dos meses para que concluya el 2021 y Puebla, según el comunicado técnico de la Secretaría de Salud federal, ha reportado 15 mil 073 muertes; esta cifra se encuentra por debajo de las 15 mil 676 defunciones que ha confirmado el gobierno del estado en sus ruedas de prensa matutina.
Falta, para llegar al escenario catastrófico poco más de mil defunciones y, cabe recordar, el estado está ya en semáforo verde, lo que podría acelerar las cosas, pues una parte de la ciudadanía parece pensar que ya no hay virus.
Confiemos en que no llegaremos a tan fatídica cifra.
