Desde el día uno se cumplió lo que ya varios habían predicho: la campaña de Lalo Rivera contra los ambulantes viene y duro.
Desde el viernes y hasta este domingo las calles como la 8 y la 10 Poniente, y todo el corredor 5 de mayo,permanecieron sin ambulantes.
El edil anunció que iniciará un ‘dialogo’ con los ambulantes para iniciar un proceso de reordenamiento en la ciudad porque “el desorden nos afecta a todos”.
El panista afirmó que su administración está dispuesta a que los ambulantes hagan su trabajo, eso sí, sólo en los lugares dispuestos para ello y sin afectar a terceras personas.
Ante este hecho saltan dos discursos opuestos:
El primero, el de los ‘verdaderos comerciantes’, o sea, el comercio establecido: la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco Servytur) y el Consejo de Comerciantes del Centro Histórico destacaron el retiro de ambulantes de la zona durante y esperan que así se mantenga.
El de los comerciantes ambulantes: no se puede impedir en su totalidad que se instalen ante las condiciones de desempleo y falta de ingresos económicos, considera la UPVA 28 de Octubre.
Lo que vimos estos tres días no es sino la antesala de lo que veremos los próximos tres años. Al tiempo.