“En ningún momento estamos investigando nosotros conducta de ciudadanos. El presidente fue el presidente, tan es así que volvió a ganar la elección; hasta ahí nada más. El partido es netamente político, el partido no puede andar de aquí para allá investigando conductas de la sociedad”, expresó el líder del partido Pacto Social de Integración (PSI) y diputado local, Carlos Froilán Navarro Corro, sobre el edil detenido de Quecholac, José Alejandro M.
Estas palabras nos dan una idea general del pensamiento de muchos partidos y una explicación para muchos de los casos de políticos presos que estamos viendo en la actualidad.
“El partido es netamente político, el partido no puede andar de aquí para allá investigando conductas de la sociedad”, dijo el líder del PSI. En este entendido, entonces, cualquiera que quiera ser candidato de su partido y, tenga la simpatía de la gente, puede serlo ¡Así sea un delincuente!
Aquí hacemos un paréntesis, pues no es la intención de estas palabras defender o condenar al edil de Quecholac de cuya situación poco se sabe. Es un error prejuzgar, aunque sea para defender a los acusados.
Pero sí deja mucho que desear una declaración así. Deja ver la línea que siguen muchos partidos y el por qué ahora salen tantos diputados violadores o suplentes de diputadas que venden ¡barrets! “y todos lo saben”.
¿Y el partido que los postuló? ¿No lo sabía o no lo quería saber? ¿Qué tipo de principios tiene un partido que afirma que no puede investigar las conductas de sus integrantes? ¡Por lo menos por imagen, sepan a quiénes postulan!
Por eso, recalcamos, las palabras de Navarro Corro son de vergüenza, pero de experiencia y realidad.