*Especialista de Moody’s advirtió que México presentará bajo crecimiento económico a partir de 2022, lo que podría bajar su calificación
La economía de México no regresará a los rangos de crecimiento que se tenían antes de la pandemia, pero es improbable que pierda el grado de inversión.
A través del foro: “Inside Latam”, Renzo Merino, especialista de Moody’s Investors Service (una agencia de calificación de riesgo estadounidense que realiza la investigación financiera internacional y el análisis de las entidades comerciales y gubernamentales), expuso: México, resaltó que el comportamiento económico de México será menor incluso en comparación con naciones que cuentan con la misma calificación crediticia.
“Creemos que la economía mexicana no va a recuperar la senda de la prepandemia”, manifestó.
Independientemente de se espera que en 2021 y 2022 haya alto crecimiento económico, México regresará después a rangos de crecimiento por debajo de 2 por ciento al menos hasta finalizar la actual administración.
Será (probablemente), en 2022 que el Producto Interno Bruto (PIB) de México, regrese a los niveles que tenía en el 2019.
Renzo Merino dejó en claro que es improbable que nuestro país pierda su grado de inversión, a pesar de las presiones fiscales que mantiene por el rescate a Petróleos Mexicanos (Pemex).
“Tendría que haber una caída pronunciada y sostenida del crecimiento económico, donde la economía debería apenas crecer o hasta contraerse por un periodo prolongado y donde los desbalances macroeconómicos irían aumentando”, explicó.
Aun así, por parte de Moody’s el bajo crecimiento económico sería un factor que podría derivar en la reducción de la calificación a México, que actualmente es de Baa1 con perspectiva negativa.
“Si viéramos crecimiento inferior a 2 por ciento en el mediano plazo, eso podría crear ciertas presiones para el perfil crediticio en particular porque podrían pesar sobre la fortaleza económica, con menos resiliencia a choques y menos ingresos para el gobierno. Un segundo factor es si viéramos un aumento sostenido en las rigideces fiscales y que pudieran pesar sobre la fortaleza fiscal”, explicó.