Este miércoles, el izquierdista, Pedro Castillo Terrones, tomó posesión como mandatario de Perú.
Tras un periodo de unas reñidas elecciones, el exmaestro de escuela y líder sindical Pedro Castillo, de 51 años, asumió este miércoles el cargo de presidente de Perú en medio de una importante asistencia local e internacional en donde el nuevo presidente juramentó ante los asistentes prometiendo que este mandato se levará entre 2021 a 2026.
La ceremonia tuvo lugar en el Congreso peruano en Lima y contó con la presencia del canciller mexicano Marcelo Ebrard, así como presidentes y representantes de variospaíses sudamericanos y el rey de España, Felipe VI.
En la sesión iniciada alrededor del mediodía, la jefa del Congreso, la opositora María del Carmen Alva, le colocó la banda presidencial bicolor.
Tras juramentar, el mandatario peruano, compartió estrado con su nueva primera vicepresidenta, Dina Boluarte, quien también se comprometió a cumplir con el cargo.
Vestido con traje andino negro con bordados y su clásico sombrero blanco de copa alta de Cajamarca, Castillo acudió caminando de la mano de su esposa, Lilia Paredes, al Parlamento desde el Palacio de Torre Tagle, la sede de la cancillería, distante a cuatro cuadras
El izquierdista Castillo es el quinto presidente de Perú en cinco años y solo fue declarado presidente electo del país la semana pasada después de que el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) desestimara las apelaciones restantes presentadas por su oponente, Keiko Fujimori, con respecto a las acusaciones de irregularidades en la votación se encontraron sin fundamento.
El JNE dijo que Castillo ganó las elecciones con el 50.126% de los votos.
Los dos candidatos fueron separados por solo 44.263 votos, un margen muy estrecho para un país con una población de alrededor de 33 millones.
Debido a que el JNE estaba obligado a investigar las acusaciones de Fujimori, fue que se dio el retraso sin precedentes entre la segunda vuelta de las elecciones de junio y la declaración oficial de la semana pasada.
De acuerdo con la ley electoral del país, solo se puede declarar un ganador después de que el JNE haya revisado todos los recuentos de votos y resuelto las quejas de los monitores electorales. No existe un mecanismo de recuento de votos en el sistema electoral de Perú.
Luego de una elección sin precedentes que polarizó al país, Castillo, sin experiencia en gobernar, tendrá que andar con cuidado para lograr consensos en un escenario político profundamente dividido y calmar al 49,874% restante de votantes que no votaron por él.
Además del desafío que enfrenta, el partido de Castillo, Perú Libre, tiene solo 37 de los 130 escaños, lo que significa que el exmaestro rural deberá tender puentes en todos los pasillos para cumplir cualquiera de las promesas sobre las que basó su campaña electoral.
El 28 de julio marca el bicentenario de la independencia del país.