Luego de que el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, retara al gobernador de Michoacan, el perredista Silvano Aureoles, a presentar pruebas de que Morena está coludida con el narcotráfico, Aureoles acudió este martes a Palacio Nacional a solicitar una audiencia con el mandatario, misma que nunca le otorgó.
Silvano Aureoles aseguró que, ya que el presidente había pedido pruebas sobre la vinculación de Morena con el crimen organizado y su intervención en la elección, “hoy le solicito audiencia para mostrarle toda la información que tengo personalmente ya que es un tema muy delicado y peligroso para la nación”.
Sin embargo, el primer mandatario se negó a recibirlo argumentando que él no podía atender temas electorales porrespeto “a la investidura presidencial”.
“No puedo yo estar aquí recibiendo a personas, a autoridades, para atender cuestiones electorales, o acusaciones de tinte político electoral, no me corresponde eso, hay que respetar la investidura presidencial”, sentenció AMLO.
Por su parte, Aureoles Conejo aseguró que tiene la esperanza de que el presidente “entienda la relevancia y la urgencia de reunirnos para presentarle la información porque, insisto, se trata de un asunto de seguridad nacional”.
Y adelantó que acudirá “a todos los espacios necesarios para que no permitamos que a Michoacán regrese el narcogobierno”; asimismo, informó que este jueves acudirá a la Suprema Corte de Justicia de la Nación “para presentar las pruebas que tenemos”.
El gobernador de Michoacán tuvo que esperar por más de cuatro horas sentado en un banquito de plástico, sin embargo, no fue recibido.
Quien sí fue atendido en persona por AMLO fue el empresario Carlos Slim, quien compartió que trató con el presidente temas de infraestructura y desarrollo nacional.
El lunes 28, AMLO recibió a Javier Corral y a Enrique Alfaro, gobernadores de Chihuahua y Jalisco, respectivamente, con quienes estableció un diálogo fraterno, según los gobernadores.