Para llegar al Congreso hay dos caminos: la mayoría relativa y la representación proporcional.
Los diputados que llegan por mayoría relativa son aquellos que son votados y ganan durante las elecciones.
Los de representación proporcional o ‘plurinominales’, son elegidos por las dirigencias de los respectivos partidos a los que pertenecen y no necesitaron hacer campaña, aparecer en boletas electorales ni promover el voto ciudadano para tener un curul.
Lo único que necesitan es un poco de suerte. Para alcanzar un lugar es necesario que su partido haya sido votado.
La representación proporcional toma como base el porcentaje de votos obtenidos por un partido político, de acuerdo a una lista que el partido entrega, el IEE decide cuántos curules le corresponden. Mientras más árriba esté el nombrre, más posibilidades tendrá de obtener un lugar en la legislatura.
En esta elección el IEE repartió ya los 15 lugares que hay para los ‘pluris’.
El PAN y el PRI lograron tres posiciones; PT, Morena y Pacto Social de Integración (PSI) dos; Verde Ecologista de México (PVEM), Movimiento Ciudadano y Nueva Alianza se quedaron con uno respectivamente.
De estos quince, nada más y nada menos se cuentan a seis dirigentes estatales de partido. Nada despistados se aseguraron de colocarse entre los primeros números de la lista de pluris y así asegurar su lugar.
Ser dirigente de un partido fácilmente te puede llevar al Congreso bajo el no tan noble pero sí muy legal arte de ganar sin hacer campaña.