Se dio a conocer que el gobierno de Claudia Rivera Vivanco gastó, en el año 2019, un total de 345.6 millones de pesos en “compras de pánico”, realizadas de prisa, sin pulcritud en los procedimientos administrativos a empresas o personas constituidas fiscalmente de manera muy reciente y algunas de forma irregular, así como con contratos colmados de anomalías.
Esas transacciones ocurrieron entre octubre y diciembre de ese año y, con ellas, el Gobierno municipal benefició a 125 empresas que “no acreditaban la suficiente experiencia” y “con menos de un año o un año máximo” previo a recibir contratos y el dinero del erario municipal de Puebla.