La violencia sigue empañando las protestas en Colombia, en su mayoría pacíficas, que este 28 de mayo cumplieron un mes.
En Cali, la tercera ciudad del país y una de las que ha llevado la peor parte de los disturbios, al menos tres personas murieron este viernes.
Según el alcalde, Jorge Iván Ospina, en medio un aparente enfrentamiento entre personas que instauraron bloqueos en zonas residenciales y habitantes que se disponían a salir del lugar.
«Tres personas, desafortunadamente, han muerto. Expreso a sus familias mi solidaridad y condolencias. Esta situación ha ocurrido entre quienes bloquean y entre quienes querían pasar. La reyerta ha traído esta situación alocada de muerte y dolor«, dijo Ospina en un video divulgado por la Alcaldía.
«No podemos permitir que estas circunstancias sigan ocurriendo en Cali. No debemos caer en la tentación de la violencia y la muerte. Por el contrario, la justicia y el diálogo son los conceptos que deben operar y son complementarios. Necesitamos justicia frente a los eventos de La Luna (barrio donde ocurrieron los hechos), necesitamos el diálogo para abrir puertas a la concertación y tranquilidad ciudadana», agregó el gobernante local.
La situación de la ciudad es tal que el presidente Iván Duque viajó hasta Cali con el ministro del Interior, Daniel Palacios, para realizar una reunión con los gobernantes locales y discutir la seguridad.
Tras eso, el mandatario anunció la nueva medida. “A partir de esta noche empieza, el máximo despliegue de asistencia militar a la Policía Nacional en la ciudad de Cali y en el departamento del Valle. Este despliegue se hará en cabeza de oficiales de la más alta experiencia”, indicó en una rueda de prensa este viernes.
Ese aumento implica triplicar la capacidad de la fuerza pública en tan solo 24 horas en todo el departamento. Una de las misiones centrales de los agentes será desbloquear las vías que han sido taponadas por los manifestantes en el mes de protestas. Actualmente, hay cerca de 7.000 miembros de las fuerzas del orden que están en esas labores, según Duque.
“Islas de anarquía no pueden existir en nuestro país (…) No se puede dejar de hacer ninguna intervención por parte de la fuerza pública ante ningún hecho vandálico”, declaró al respecto el presidente.
Igualmente, anunció un “servicio de asistencia en comunicaciones para que quienes están al frente de esta operación informen cada acción para que haya total transparencia frente al actuar de la fuerza pública”.
«Quiero ser muy enfático en que nuestro país siempre ha mantenido canales para que haya deliberación y concertación frente a las necesidades de la ciudadanía, pero no negociando la constitución y los derechos de los ciudadanos«, agregó.
La Alcaldía de Cali ya había decretado un toque de queda desde las 19:00 de este viernes hasta las 5:00 del sábado.Pero Duque aclaró que los gobiernos locales junto con el nacional evaluarán si extienden la medida durante todo el fin de semana.
La ONU y HRW también se pronuncian por la violencia que se vivió este viernes en Cali
Tanto la Oficina de la ONU en Colombia para los Derechos Humanos como la organización Human Rights Watch (HRW) afirmaron que había personas vestidas de civil disparando en contra de los manifestantes en Cali.
José Miguel Vivanco, director para las Américas de HRW, expresó en un tweet que la situación de la ciudad “es muy grave” y en otra publicación de la red social le pidió al ministro de Defensa, Diego Molano, que dé una “explicación urgente” por “la inacción” de agente de la Policía ante los disparos de civiles.
Por su parte, la Oficina de la ONU dijo este viernes en Cali hubo por lo menos tres muertos y varios heridos. “Estamos en contacto con autoridades y urgimos a asegurar la vida e integridad de todas las personas. Llamamos a la calma y la no violencia”, indicó el organismo a través de su cuenta de Twitter.