Andrea Meza, originaria de Chihuahua, fue coronada como la mujer más bella del mundo en la edición 69 de Miss Universo.
Debido a la pandemia de Covid-19 fue suspendida el año pasado y ahora se realizó con una atípica ceremonia en el Seminole Hard Rock Hotel & Casino, en Florida, y la mexicana fue la elegida.
La sucesora de Zozibini Tunzi, que lució un vestido rojo entallado con transparencias y brillos desde el comienzo de la jornada se perfiló como una de las favoritas a la corona gracias a su carisma, porte y belleza.
Andrea Meza tiene 26 años de edad, es egresada de la Universidad Autónoma de Chihuahua, donde se coronó como Reina UACh; es modelo profesional y filántropa, pues forma parte del patronato de fundaciones que apoyan a la niñez en situación de vulnerabilidad.
El mensaje central del concurso de belleza fue buscar a una mujer líder y emprendedora para inspirar a otras y que hagan un cambio en la sociedad, además de que sea una fiel promotora de la inclusión bajo el lema Mujeres Unidas, objetivo en común de la ganadora quien es una activista en defender los derechos de la mujer y la equidad de género.
“Vivimos en una sociedad que cada vez esta más avanzada y en los estereotipos. Hoy en día, la belleza no radica en cómo nos vemos, para mí, radica en nuestro espíritu, en nuestra alma y en nuestros valores. No permitan nunca, que nadie les diga que no tienen valor”, dijo durante su discurso la también ingeniera en software.