Los 10 de mayo, día de celebración para las familias mexicanas, desde hace 10 años, ha dejado de ser motivo de fiesta para 80 mil madres, quienes utilizan ese día para marchar por sus hijos desaparecidos.
En Puebla, existen actualmente dos mil 671 personas desaparecidas. Alrededor de dos mil madres seguramente no celebraron este día, sino que lo utilizaron para luchar.
Secuestros, desapariciones forzadas, feminicidios, trata de personas, reclutamiento de cárteles, tráfico de órganos… son tantas las causas de las desapariciones y tan pocas las acciones para combatirlas.
¿Y el gobierno? ¡Brilla por su ausencia! Mientras miles de madres marchaban con el dolor de no tener a sus hijos, de no saber si están vivos o muertos, en Palacio Nacional el presidente de la república convertía la ‘mañanera’ en un concierto con Eugenia León. La música alegre opacó los tristes y enojados gritos de las madres que le esperaban fuera de su residencia.
Para esas mujeres, este 10 de mayo, y ninguno desde que sus hijos desaparecieron, fue un “feliz día de las madres”.