María de Lourdes Rosas López, catedrática e investigadora de la Facultad de Ciencia Política y Gobierno de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla alertó que a causa de la pobreza que se ha agravado por la pandemia del Covid-19, las caravanas de migrantes de Centroamérica hacia Estados Unidos seguirán aumentando.
Rosas López, resaltó que existe una industria de la migración que deja grandes ganancias en diversos rubros, principalmente a grupos de delincuentes. La especialista agregó que, a la economía estadounidense, para mantener sueldos bajos y no generar inflación, le es conveniente contratar a trabajadores centroamericanos sin documentos que hagan el trabajo por un bajo sueldo.
Lo anterior, al señalar que México, por ser un país de tránsito, está en el ojo de huracán porque de la frontera sur a la norte son más de tres mil kilómetros que deben cruzar los migrantes. En el caso de Puebla, dijo que es territorio importante porque los migrantes pueden atravesar usando la ruta del tren conocido como “La Bestia”, las carreteras, o caminando.
La especialista explicó que las caravanas se crean para protegerse durante el tránsito, porque encuentran delincuentes locales y trasnacionales que se dedican al tráfico humano, los secuestras o violentan hasta la muerte.
Otro rol de la caravana es disminuir el costo económico de migrar, porque el pago a los polleros puede llegar hasta los 10 mil dólares o más por persona. Antes dijo, sólo migraban hombres, ahora migran mujeres, niños no acompañados y hasta grupos familiares.
En Puebla, de enero a septiembre del presente año solo se emitieron 9 tarjetas a migrantes de Honduras, El Salvador y Guatemala por razones humanitarias, “lo que significa nada en comparación con el número de centroamericanos que pasan por la entidad”.